LA MEDITACIÓN EN PALABRAS “DE A CENTAVO”

   Más y más cada día, aumenta la popularidad de las técnicas de relajamiento siendo la más popular de éstas la meditación. La meditación es una práctica antiquísima. Estamos hablando probablemente de unos 1500 años antes de Cristo. Hasta hace poco, era considerada misteriosa y exclusiva de los yoguis o seres iluminados. Las religiones tradicionales se inclinan a calificarla de práctica pagana.

     Muchas personas han aprovechado esta adquirida popularidad para fundar escuelas, crear negocios lucrativos, sirviendo como facilitadores de esta práctica (sinceramente, hasta yo lo he pensado!). Venden la idea de que la meditación es complicada, que solo algunos SABEN cómo hacerla y el humano ordinario o promedio debe ser guiado para meditar cómo se debe.

     Por otro lado, tenemos a las personas fanáticas religiosas que creen estar “pecando” si tan siquiera les pasa por la mente la palabra “meditación”. Aunque parezca una tontería, he sido testigo de la dificultad que tienen algunas personas de cerrar sus ojos para comenzar a meditar, cuando el propósito de cerrarlos es facilitar la concentración. Eso es todo!

     Todo ser humano sabe y puede meditar por sí solo. Es cierto que una meditación guiada es, sin lugar a dudas, más fácil y, en ocasiones, más efectiva que una meditación a solas. Has querido meditar y aún dudas si lo harás correctamente? Los elementos básicos para llevar a cabo una experiencia meditativa simple y gratificante son:

     - Espacio y tiempo.

     - Cerrar los ojos.

     - Una postura cómoda.

     - Respirar consciente, profunda y rítmicamente.

     - Manejar los pensamientos.

     - Tener un objetivo.

     - Mantener un estado de Apertura y Gratitud.

   He aquí una breve explicación de cada uno de éstos:

-  Para meditar es necesario un lugar donde puedas estar en Paz, en silencio, sin interrupciones; también tiempo, sin importar si es solo unos minutos o una hora.

-  El cierre de los ojos durante la meditación no es más que la acción para desconectarte del mundo exterior. Durante la meditación, tu atención debe estar enfocada en tu mundo interno.

-  La posición cómoda es para evitar las distracciones provocadas por dolores musculares o adormecimiento de algunas partes del cuerpo debido a tu postura.  

-  Cómo debes respirar? Inhalando profundamente por la nariz, reteniendo el aliento por unos segundos, y exhalando por la boca despacio, tratando de sacar la última “gota” de aire de tus pulmones, repitiéndolo al menos tres veces. Todo lo que tienes que hacer acto seguido es respirar como lo haces naturalmente cuando duermes: rítmica y apaciblemente. Respirando así, se inducen los estados de Calma y de Paz necesarios para disfrutar de la meditación. Un beneficio saludable y adicional de respirar profundamente es el aumento de la cantidad de oxígeno que llega al cerebro.

-  Tu mente piensa constante y continuamente, sin parar ni un instante. Suena ilógico, pero los pensamientos tienen a las personas, y no lo contrario. Es prácticamente imposible detener el flujo de pensamientos. Sin embargo, sí se puede dejarlos ir. Llega un pensamiento, se recibe, y se deja ir. Por ejemplo, en plena meditación piensas: “Tengo que pagar la renta”; lo sostienes por unos segundos, y pensando algo así como “Gracias a Dios que tengo cómo”, lo dejas pasar, centrando tu atención de nuevo en cómo estás respirando. 

-  Es esencial que medites centrad@ en un objetivo, que puede ser cualquiera de tu preferencia. Puedes meditar solo porque quieres experimentar ese estado de Paz Interior que tanto te agrada, o porque quieres visualizar una meta, o quieres fortalecer la conexión con Dios, sea cual sea el concepto o idea que tengas de Éste. 

-  Junto con el objetivo de meditación, es saludable y positivo sostener un estado de Gratitud y Apertura. Agradecer todo aquello que está sucediendo o que ha sucedido en tu vida tiene un poder milagroso. El estar abierto a las posibilidades facilita la vía para manifestar tus regalos celestiales tangiblemente.

   No hay nada de extraño, sacrílego, o misterioso en la meditación, y sí beneficios innegables. La meditación es la forma de orar de la Nueva Tierra. Es una simple práctica que facilita al alma la conexión vital con el Creador De Todo Lo Que Existe, nuestro Creador Universal.

   

   Te animas a practicarla ahora?

   ~ DeMiSDeTi ~