Se nos ha enseñado a creer que la Felicidad está fuera de nosotros; que consiste en tener riquezas, posesiones, en disfrutar de placeres sensuales. Sexo, comida, ropas, joyas, prestigio, fama, popularidad, etc. Enfocamos nuestra energía, dedicamos nuestra vida entera, a conseguirlo.
Definitivamente, no hay nada de malo en ello, y en verdad, resultan muy gratificantes. El detalle está en que no son la fuente de la Felicidad, pero esto es lo que creemos. Lo tenemos tan arraigado en nuestro subconsciente, que nos impide liberarnos de, nos limite, nos engaña como el mago con sus actos de ilusionismo.
La verdadera Felicidad está en nuestro interior, y la expresamos cuando respiramos conscientemente y nos damos cuenta de que estamos vivos! Cuando nos hemos dado cuenta de la magnífica creación que somos, y que pertenecemos, no a una porción de tierra, sino al Universo mismo. Yendo aún más lejos, la Felicidad es un estado mental.
RECUERDA: Rico no es aquel que más tiene, sino aquel que menos necesita.
NAMASTE.
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